Inicio del año jubilar en el Arciprestazgo de Ágreda

El sábado 11 de enero, el Obispo, Monseñor Abilio Martínez Varea, presidió la eucaristía en uno de los templos jubilares de la Diócesis, la Basílica de Ntra. Sra. Virgen de los Milagros de Ágreda. En torno a unos trescientos feligreses, procedentes de diversas localidades del arciprestazgo de Ágreda, se dieron cita a la entrada del templo.

La celebración comenzó a las 18:30 con una procesión, que se inició a los pies de la imagen de la Virgen de los Milagros, situada en la Plaza del Patronazgo. Después de los ritos iniciales, y precedidos de la cruz, la comitiva se encaminó hacia la basílica entonando cantos alusivos al acto. Cerca del templo, la procesión hizo una breve pausa en la que D. Abilio bendijo una placa de agradecimiento a los artífices de la transformación del Patio del Fuerte en la Plaza del Patronazgo. A continuación, el pueblo fiel entró por la puerta principal y se dirigió hacia la capilla del bautismo. Después de leída la bula del Año Jubilar y bendecida el agua de la fuente bautismal, cada participante veneró la pila como signo de agradecimiento de su propio bautismo.

Seguidamente, comenzó la solemne eucaristía, presidida por el Obispo, al que acompañaban el párroco de Ágreda, Alberto Blanco, y varios sacerdotes del Arciprestazgo. En su homilía, D. Abilio glosó la importancia de vivir un año jubilar, como fuente de esperanza y presencia de Cristo resucitado en la Iglesia. Hizo referencia a su origen en el Antiguo Testamento y al deseo de su santidad el Papa Francisco de renovar la virtud teologal de la esperanza en la vida cotidiana de los cristianos. Durante la celebración, los coros parroquiales animaron al canto. Concluyó la inauguración con el himno a la titular del templo.

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