Profesión solemne perpetua de una hermana Clarisa en el monasterio de Santo Domingo de Soria

La mañana del sábado 12 de junio la Hna. Luz María del Espíritu Santo, del convento de las HH. Clarisas de Soria, celebró su Profesión perpetua en la iglesia de Santo Domingo. El Sr. Obispo de Osma-Soria, Mons. Abilio Martínez Varea, presidió una bella y emotiva celebración, en cuya homilía citó el documento del Concilio Vaticano II Perfectae caritatis, carta magna de la vida religiosa, en la que se recuerda que “la entrega total a Dios en la soledad, en el silencio, en la oración constante y en la austera penitencia es el modo en el que los miembros de la vida consagrada enriquecen la vida de los demás dando fruto de santidad, con fidelidad a Cristo pobre y crucificado durante toda la vida”. Destacó a su vez la importancia del sencillo pero valiente testimonio de vida de la nueva hermana profesa, recién desposada -como Santa Clara- místicamente con Cristo, con las palabras de Pablo VI en Evangelii nuntiandi: “El mundo escucha más a los testigos que a los maestros”. Al final de la Misa Sor Luz María dirigió a la comunidad presente unas palabras de agradecimiento a Dios, a sus hermanas, al Sr. Obispo, a los sacerdotes y demás personas que la han acompañado en su camino y, en especial, a sus padres y hermana, con la certeza y seguridad de que el saberse elegida por Dios es el mayor de los regalos, regalo que cuidará con su fidelidad y gastará en una entrega total.

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