El 29 de marzo, Miércoles Santo, se celebró en la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción de El Burgo de Osma, la Misa Crismal, en la víspera del Triduo Pascual. Esta solemne concelebración, que reúne cada año a todo el presbiterio diocesano junto a su Obispo, es también un momento en el que los presbíteros hacen renovación de sus promesas sacerdotales.
En la Misa Crismal se consagra el santo crisma (la palabra crisma proviene de latín chrisma, que significa unción) y se bendicen los demás óleos y es a su vez manifestación de comunión de los presbíteros con el propio Obispo.