En la tarde del domingo 1 de mayo, II Domingo de Pascua y Domingo de la Divina Misericordia, el Obispo de la Diócesis de Osma-Soria, Mons. Gerardo Melgar Viciosa, ha presidido la profesión solemne de la Hermana Consuelo del Corazón de María.
La joven profesa, de origen hispanoamericano, más concretamente de Perú, ha emitido los votos solemnes según la Regla de Santa Teresa de Jesús en el Monasterio de San José, de El Burgo de Osma, en la celebración de la Eucaristía que ha dado comienzo a las cinco de la tarde.
Acompañada de todas las hermanas de la Comunidad de MM. Carmelitas, así como de una decena de sacerdotes y numerosos fieles, la nueva profesa ha prometido obediencia, castidad y pobreza «según la Regla primitiva de la Orden de Carmelitas» hasta la muerte.
En su homilía, el prelado oxomense-soriano ha reflexionado en torno a los «motivos que, en la actual sociedad, pueden llevar a una joven a entregarlo todo, hasta su vida, en un monasterio de clausura cuando, podrían decir algunos, en el mundo hay tanto que hacer». «Estos motivos son, ha concluido el Obispo, el descubrir el amor infinito de Dios por ti y la necesidad de la Iglesia, y de los que fuera del convento luchamos por anunciar el Evangelio de Jesucristo, de ser sostenida con tu oración».