El sábado seis de junio tuvo lugar, en el Seminario diocesano, el último de los encuentros de monaguillos de este curso pastoral.
Casi sesenta chavales venidos desde las distintas UAP´s y parroquias de la Diócesis (Langa de Duero, Bocigas de Perales, San Esteban de Gormaz, El Burgo de Osma, Covaleda, Duruelo, Almazán y Medinaceli junto con chicos de las de San Pedro Apóstol, Santa Bárbara y Santa María La Mayor, de Soria) acompañados por sus sacerdotes, participaron en este encuentro que se desarrolló en un ambiente alegre, divertido, reflexivo y de fe.
La mañana estuvo dedicada, tras los juegos y dinámicas de presentación, usando el ejemplo del niño Samuel, al tema: «La llamada: Dios nos llama pero ¿le oímos?». Los chicos se adentraron a descubrir qué les impide -muchas veces- poder escuchar la voz de Dios que les llama a su seguimiento. A mediodía, con la presencia de los seminaristas menores, los monaguillos disfrutaron de un buen rato de diversión.
A las dos tuvo lugar la comida. Desde este momento, y para el resto de la jornada, quiso estar presente el Sr. Obispo, Mons. Gerardo Melgar Viciosa. Tras la comida, se disputó un torneo de fútbol, en el que se demostraron las grandes cualidades deportivas de muchos de los asistentes.
En torno a las cuatro y media de la tarde, mantuvieron un momento de encuentro y diálogo con D. Gerardo que fue respondiendo una a una a todas las preguntas que los chavales le fueron planteando, y que abarcaron todo tipo de cuestiones. Tras el diálogo con el Obispo vieron y comentaron un vídeo en el que se animaba a los monaguillos a ser valientes en el descubrimiento de su vocación.
Después de alrededor de una hora de distendido y cariñoso diálogo con el Sr. Obispo, se puso el punto y final a la jornada con una sencilla celebración en la cual los monaguillos renovaron sus compromisos de fidelidad a Jesús y ellos mismos, con los seminaristas y sacerdotes presentes, se consagraron a la Virgen Madre.