Más de sesenta colaboradores de las Cáritas parroquiales de la Diócesis de Osma-Soria participaron, por séptimo año consecutivo, en torno al Día internacional del voluntariado y como preparación al Año del voluntariado (a celebrar en el 2001), en una jornada de convivencia de todas aquellas personas que prestan su ayuda para llevar adelante las múltiples tareas de la ONG católica, Cáritas.
Colaboradores de las diferentes Cáritas de Soria capital o de Ágreda, Almazán, San Leonardo de Yagüe, Ólvega, etc. quisieron hacerse presentes en un día tan significativo para todos ellos.
El día elegido para llevar a cabo esta Jornada fue el sábado 27 de noviembre, víspera del comienzo del tiempo litúrgico del Adviento, pues -como afirma el delegado episcopal de Cáritas, Javier Santaclotilde Ruiz- «estamos convencidos de que la entrega gratuita a favor del hermano es un signo de esperanza para la humanidad y, especialmente, para los pobres».
Las actividades de la Jornada (que se desarrollaron en el Centro de formación que Cáritas posee en el Polígono Industrial «Las Casas II») arrancaron a las once de la mañana con la acogida de los participantes y con un momento de oración. Tras la acogida y la oración inicial, Andrés Picón, Vicario episcopal de acción caritativo-social, hizo la presentación (en torno a la que giro el posterior trabajo por grupos) sobre la campaña 2011 de Cáritas «Fraternidad+compromiso=voluntariado». En torno a las dos se tuvo la comida, a la que siguió un tiempo de convivencia y juegos.
La Jornada culminó a las cinco y media de la tarde con la celebración de la Santa Misa, que presidió el Obispo diocesano, Mons. Gerardo Melgar Viciosa, en la parroquia de San José, de la capital soriana.
Según afirmó Santaclotilde Ruiz «todo salió muy bien gracias al buen hacer y a la generosa colaboración de tantas personas que nos ayudaron y apoyaron para hacer posible que esta jornada cumpliera su objetivo de ser un día de formación, oración, diálogo y fiesta desde nuestro ser ministros de la caridad y voluntarios en Cáritas Osma-Soria».
A lo largo de toda la Jornada, como también indicó el delegado episcopal de Cáritas, «estuvo muy presente la figura y el mensaje de nuestro próximo beato, Juan de Palafox, que es para nosotros un modelo a seguir en su vivencia de la pobreza y en el trato con los más pobres de su época (…) pues todos encontraban en él auxilio espiritual y material para cubrir sus necesidades».